Yechiel Eckstein
Todos los años se celebra en Israel el Yom Yerushalayim (el Día de Jerusalén), en el cual se conmemora la liberación milagrosa de la Ciudad Santa durante la guerra de los Seis Días, en 1967. Este año la festividad empecerá al atardecer del día 28 del mes hebreo de iyyar.Durante los meses que precedieron a la guerra en 1967, Israel se vio constantemente amenazada y provocada por sus vecinos. En mayo, Egipto bloqueó los estrechos de Tirán, para frenar el comercio mercantil con el importante puerto israelí de la ciudad de Eilat. Los ejércitos de Egipto, Jordania, Siria, Iraq y el Líbano estaban en sus respectivas fronteras listos para atacar al pequeño Estado de Israel, que en ese entonces tenía solo 14 kilómetros de ancho en la parte más angosta. «La existencia de Israel es un error que debemos corregir», dijo el presidente iraquí Abdel Rahman, y no dejó ninguna duda en cuanto a lo que se proponían hacer. «Esta es nuestra oportunidad para deshacernos de la ignominia que ha estado con nosotros desde 1948. Nuestra meta es clara: borrar del mapa a Israel», añadió.
Para Israel las alternativas eran claras: esperar ser invadida por los ejércitos enemigos, que eran mucho más numerosos que su ejército, o lanzar un contraataque como medida preventiva. Consciente de que su misma existencia corría peligro, Israel optó por la segunda alternativa. El resultado fue lo que se conoce como la guerra de los Seis Días, que fue una gran victoria para Israel y llevó a la reunificación de Jerusalén bajo el dominio israelí.
Los sucesos que se dieron durante la toma de la ciudad son legendarios. Años más tarde, durante una entrevista, el paracaidista Yoske «Balagan» Schwartz explicó lo que vio como miembro de la unidad especial de las FDI que tomó la antigua ciudad: «Recuerdo que de pronto, decenas de miles de judíos - jóvenes y adultos, hombres y mujeres - corrían hacia el Muro occidental y lloraban, nos abrazaban y decían que éramos héroes».
«Nosotros no nos considerábamos héroes - recuerda Schwartz -, pero lloramos y oramos con ellos… Estaba sentado en frente del Muro occidental, y me sentí lleno de Jerusalén. Siempre digo que antes había pensado: “¿Quiénes son estos con shtreimels y payot [el sombrero de piel y los mechones al lado de las orejas que llevan los judíos ortodoxos]? Yo no soy como ellos. Yo soy un israelí moderno”. Pero cuando llegué al Kotel [el Muro occidental], comprendí que yo también era judío. Entonces me embargó la emoción».
Hoy en día Jerusalén sigue en manos de los judíos, pero siempre se ve amenazada, y no sólo por los terroristas. La mayoría de las naciones, incluso EE.UU., aún no la reconocen como la capital de Israel. Algunos dicen que debería ser designada como «ciudad internacional», lo cual significa que sería una ciudad que no pertenece a ningún país en particular. Otros dicen que debería ser dividida en partes iguales entre israelíes y palestinos. Estas propuestas son una afrenta a los derechos bíblicos e históricos que Israel tiene sobre Jerusalén: la ciudad que el ex primer ministro Ariel Sharon dijo que era «la capital eterna del pueblo judío… es para siempre la capital unida e indivisible del Estado de Israel».
El salmista escribió: «Si me olvido de ti, Jerusalén, pierda mi diestra su destreza» (Salmo 137:5). Tal como lo hacemos todos los años para este tiempo, propongámonos nunca olvidar esta ciudad antigua y santa, que es sagrada para judíos, cristianos y musulmanes; la capital cultural y de la vida judía por más de 3.000 años.
En oración pidiendo por shalom, la paz,
Rabino Yechiel Eckstein
Fuente: http://www.fraternidadinternacional.org/site/PageServer
PETICIONES ESPECIALES (en inglés): http://www.aipac.org/en/legislative-agenda/agenda-display?agendaid={50B00D38-5A87-4E29-9D5D-670022EBB2AD} / http://org2.democracyinaction.org/o/7196/p/dia/action/public/?action_KEY=10448 / http://org2.democracyinaction.org/o/7196/p/dia/action/public/?action_KEY=9867
EVENTO Y DONACIÓN (en inglés): https://www4.gotomeeting.com/register/750002079 / https://jerusalemprayerteam.org/matching-gifts.asp
¡Dios siempre estará con Israel ahora y eternamente!
¡Shalom!
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